¿Patinete o bici eléctrica?
Es innegable el auge que está experimentando en nuestras ciudades la micromovilidad con bicis o patinetes eléctricos. Teniendo en cuenta que en el año 2050 está previsto que casi el 70% de las personas vivan en ciudades, según la ONU, no es de extrañar que sea necesario buscar alternativas más sostenibles para hacer frente a la movilidad de tantas personas en un mismo espacio.
El transporte privado va perdiendo adeptos, sobre todo, entre los más jóvenes. Según un estudio, sobre Sostenibilidad y Consumo del Observatorio Cetelem, casi la mitad de los españoles (42%) se ha planteado el cambio del transporte privado de combustión por el uso de algún medio de transporte de movilidad urbana.
Ya que, según este informe, uno de cada cuatro españoles tiene la intención de adquirir una bici o patinete eléctrico, desde el Mobility Innovation Valencia queríamos ayudaros a tomar la decisión correcta ya que son muchos los aspectos a tener en cuenta antes de comprar una u otra alternativa.
Para empezar, deberías tener claras tus necesidades, posibilidades y tu estilo de vida. Pregúntate para qué quieres exactamente tu nuevo medio de transporte, qué tipos de trayectos vas a realizar con él. En este sentido, es muy importante que revises la normativa actual aplicable a ambos. Eso sí, te advertimos que se trata de una legislación en constante movimiento; sin embargo, una cosa está clara, con ninguna de estas opciones de transporte podrías circular por las aceras.
Lejos de primar la normativa de circulación, según el estudio que citábamos al principio del Observatorio Cetelem, la mayoría de los consumidores tienen en cuenta el precio para su decisión final (un 47%), en este caso, ganaría la batalla sin paliativos el patinete eléctrico. No obstante, desde el MIV te recordamos que deberías valorar también aspectos como: la versatilidad, la autonomía, el tiempo de recarga de las baterías, el mantenimiento, la velocidad o si son plegables. Por ponértelo fácil, te diremos que los patinetes ganarían en la recarga de las baterías, en la necesidad de un menor mantenimiento, en el precio y en ocupar menos espacio una vez plegado. Ahora bien, por su parte, las bicicletas eléctricas ganan en seguridad, versatilidad y en autonomía.
Elijas el modelo que elijas, lo que está claro es que perteneces a ese gran y creciente porcentaje de personas preocupadas por conseguir un planeta más sostenible, gracias a las cuales la micromovilidad es ya un hecho que está cambiando la fisonomía de nuestras ciudades.
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